LA VIDA: UN REGALO DE DIOS

He llegado a los sesenta y cinco años, casi treinta y cinco de los que me había propuesto vivir, y sigo persuadido que la vida es un hermoso regalo de Dios. Digo esto, por mi fe cristiana. Entiendo qué otros pensaran diferente. 


Pero, independientemente de las creencias de cada cual, creo que un tópico común es la GRATITUD. La vida es un hermoso regalo y merece vivirla con agradecimiento.


 


Yo mismo he pasado por todo, lo que otros han vivido: pobreza material, enfermedades, cárcel, tortura, humillaciones, crisis, momentos depresivos, infidelidad, ansiedad recurrente, perdida de seres queridos, despido laboral, acusaciones injustas, robos, desastres naturales, conflictos familiares, abusos de uno u otro tipo, guerras, y otras experiencias olvidadas en los rincones de la memoria.

He vivido, viajado, amado; he sido feliz; he llorado y a veces he querido desaparecer. Aprendi que así es la vida, y por gracia de Dios, he sobrevivido a tempestades y asonadas, y aquí estoy, esperando el día del gran viaje a la eternidad.

Que si me arrepiento de algo? Sí  por supuesto, tomé malas decisiones y herí el corazón de mis hijas y de mi esposa. 

Que si tengo defectos? Sí y muchos, he sido adicto al placer. Tengo baja tolerancia a la frustración, dependiente, neurótico, egoísta, etc

Pero he vivido, he cumplido y sobre cumplido todos mis sueños infantiles y juveniles. Todos, sin excepción. Y casi siempre me he sentido bendecido, un sobreviviente, un hombre afortunado.

He creído ser humilde, pero las personas sabias me han dicho lo contrario, que soy soberbio, y les creo. Creo tener la verdad, suelo pensar que tengo la razón, pero paradójicamente busco la aprobación de los demás. 

No he aceptado aún la evidencia de mi edad, vivo en negación, a pesar que mi cuerpo y mi mente, claramente me hacen ver cada día, que tengo sesenta y cinco años y no treinta, mi edad dorada.

Los que me conocer saben como soy, un tipo contradictorio, enamoradizo de la belleza y la inteligencia, un hombre emocional, insatisfecho, con un temperamento colérico melancólico, y otras cosas más.

Mi invitación de hoy, es que seamos hombres y mujeres AGRADECIDOS. La gratitud, nos lleva a valorar lo que tenemos, no lo que no tenemos. 

Ánimo, la vida es hermosa, aunque a veces no lo parezca. La vida es un regalo, no solamente un hecho biológico. La vida es un camino lleno de experiencia, la clave es aprender de todo lo que nos ocurre. Aprender a vivir, aprender a agradecer.

Dios les bendiga!!!


#DoktorMontiel






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