CRÓNICA DE UNA PANDEMIA (17ª parte)

La pandemia de las distopías.

Al momento de escribir esta crónica, 2.83 millones de Sapiens han contraído el SARS-CoV-2 y 198,000 han muerto, con seis países del primer mundo encabezando las estadisticas de morbi-mortalidad, siendo EEUU el lider con 927,000 casos y 52,415 muertes, una auténtica contradicción, en el contexto del s XXI.

Desde tiempos inmemoriales el Sapiens se ha alimentado de utopías, el mundo maravilloso, justo y humano que todos nos merecemos. La verdad es que poco hemos hecho por “merecer” un planeta así, todo lo contrario nos hemos concentrado en destruir el ambiente, alimentarnos mal, consumir cualquier cantidad de alcohol y drogas, y las ambiciones de poder y control no se han detenido, cientos de miles de guerras, desde la piedra de Cain, hasta el misil de hoy. De recolectores y cazadores hace miles de años, pasamos a consumidores de “basura informática” y todo aquello que se nos ofrece al imperio de los sentidos.

De manera que la utopia de santo Tomas Moro y cientos de “dreamers”, héroes y pioneros de la libertad, el amor, la esperanza y el bienestar, han sido utilizados para elaborar posters, logotipos, emblemas, símbolos y fondos de pantalla, pero no han calado en la “conciencia” de la humanidad. Millones de Sapiens han migrado del campo a la ciudad, o de un pais hacia otro, somos una especie de “vikings”, en busca del “american dream”, sin que nada ni nadie nos calme el deseo de búsqueda de bienestar y prosperidad, la utopía de siempre.

La pandemia, quizas nos ayude a comprender las distopias de la humanidad, las profundas contradicciones de las ideologias y sus funestas consecuencias. Todos los pensadores lamentan que esta terrible pandemia haya exacerbado los nacionalismos, etnocentrismos, inhumanidad, brechas de exclusión, autoritarismos, adicciones tecnológicas, nuevas dependencias, nuevas barreras comerciales, mas desigualdades, en fin, una nueva sociedad, donde la manipulación genética y la inteligencia artificial, terminen con lo poco de Sapiens que aún nos queda.

Quién imaginaría la ausencia de una estrategia global, a un problema global? Quién hubiese visualizado el final de instituciones como Naciones Unidad o la Organización Mundial de la Salud, que poco a poco irán siendo sustituidas por los “estados virtuales”, los universos “apple-google”, que con sus algoritmos nos condicionan lo que pensamos y hacemos? Estamos ante el final de una etapa de la historia y el preámbulo de una nueva. Ya los lectores del 2050, vivirán esta nueva sociedad, infelizmente más estratificada y poblada de humanos cyborg.

Nadia Thalmann ya ha diseñado cyborgs para ayudar a los adultos mayores con demencia, en Singapur, un oficio que los Sapiens no difrutan realizar. Las nuevas prótesis cerebrales conectadas a Internet libre, nos podrían llevar a la mayor de las distopías de la historia.

Pocos Sapiens conocen a Kevin Warwick, asociado al algoritmo genético “Gershwyn”, el proyecto “Morgui”, un científico británico, que se ha implantado varios chips en sus propias neuronas y en la de su esposa, en busca de re construir al Sapiens del futuro, o bien diseñar una nueva especie, la distopía mas poderosa de la historia. Nadie lo sabe con certeza. 

Al momento de redactar esta crónica, algunos predicen que esta pandemia terminará en un par de meses (junio 2020). Un líder mundial dijo hace horas que “inyectar en el cuerpo de los pacientes de covid-19 desinfectante o golpearlo con una tremenda luz ultravioleta, seria una buena idea”. Las autoridades de salud han emitido un comunicado oficial donde advierten: “Por favor, no coman pastillas de detergente ni se inyecten ningún tipo de desinfectante”. Otros lideres mundiales estudian el billonario proyecto de la “nueva vacuna y tratamiento del covid-19”. Los “estados virtuales” de Facebook, Twiter, Google y allegados, almacenan billones de bits de información de la conducta humana ante la pandemia, para darles el uso que crean mas conveniente.

Termino esta crónica a las 12.00 horas y el planeta ya cuenta con 2,86 millones de casos y 200,000 muertes. La distopía esta ganando la batalla.